Éste último denunció haber sido torturado, mediante electricidad y palizas de las fuerzas de seguridad egipcias. Según su Acuerdo de Asociación con la Unión Europea, el gobierno de Egipto debe respetar los derechos humanos. Los tres han recuperado sus trabajos en la fábrica.
Su liberación y su readmisión en la planta representan una victoria, y son una señal de la efectividad de la solidaridad que recibieron, tanto desde dentro de Egipto como desde fuera.
Los activistas egipcios envían su agradecimiento a los individuos y entidades internacionales que firmaron los mensajes de solidaridad y de protesta ante la represión. (más información)
Sigue habiendo muchos activistas detenidos en Egipto, por lo cual la solidaridad sigue siendo necesaria. La pregunta sobre el tema que se ha planteado ante la Comisión Europea sigue vigente (ver abajo).
Más importante aún, los problemas sociales y económicos que motivaron la huelga del 6 de abril siguen existiendo, y las luchas por un cambio en Egipto continúan. Sólo por poner un ejemplo, según la agencia EFE (08/06/08): “Al menos cinco personas resultaron heridas este sábado en una protesta de alrededor de 5.000 personas contra la escasez de trigo en una provincia del noroeste de Egipto.”
A pesar de todo, la liberación de estas 3 personas es una buena noticia. Nos alegra especialmente a las personas que asistimos a la Conferencia del Cairo en marzo y conocimos en persona a Karim el-Beheir.
PREGUNTA ESCRITA de Raül Romeva i Rueda (Verts/ALE) a la Comisión
16 de mayo de 2008, E-2739/08Asunto: Protestas sociales en Egipto
En las últimas semanas, varios medios de comunicación se han hecho eco de las diferentes protestas de la sociedad civil en Egipto, derivadas de la precariedad de las condiciones de trabajo en muchos sectores, como la industria, el transporte público, la educación, la sanidad o la administración.
Miles de personas, con el apoyo de movimientos sociales, salieron a la calle como contestación a la actuación policial para impedir la ejecución de la huelga convocada en la fábrica textil de Al Mahalla, la mayor de Egipto. Dichas protestas han acabado con la detención de más de 800 personas, entre las que se cuentan los más de 150 activistas políticos y más de 600 manifestantes de Al Mahalla, así como los dirigentes del comité de huelga de la fábrica.
Estos hechos no hacen sino poner de manifiesto, por una parte, una situación de insostenibilidad de las condiciones laborales y sociales, y por otra, el déficit democrático y de libertades existente en el país y la represión por parte del régimen de Mubarak, que ha contado hasta la fecha con la connivencia de occidente.
En vista de la situación y en virtud de las condiciones del Acuerdo de Asociación UE-Egipto, con especial atención al respeto de los Derechos Humanos, ¿qué opinión le merecen a la Comisión dichas noticias? ¿No cree que tal represión policial esté vulnerando de manera clara las condiciones del Acuerdo de Asociación Euro-mediterráneo, en particular su artículo 2? ¿Ha efectuado, o tiene prevista la Comisión alguna actuación al respecto, y en particular para pedir la liberación de los manifestantes y activistas?
